jueves, 10 de enero de 2008

Brote

Cuantas tempestades permanecí
de pie, que
recordarlo atormenta mi calma.



Diluvio de ilusiones
echos sequía.



Con lo mejor de mi
y lo peor de tí
no hacemos nada.



Por escatimar mis besos hoy soy
mendigo de tus labios.



En algún descuido me perdí en tí
sin que yo lo supiera.



Por consulta me he enterado
aunque tu poco me quisiste,
no fue en vano amarte tanto.



Creo en el destino
aunque sea un sinsabor.



Confía en mi, en aquel
vacío no te soltaré las manos.



Cuando claudiquen mis penas
Te necesitare sin retorno.






La esperanza es la cuesta arriba del recuerdo
y el recuerdo es ceniza en el limbo del olvido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

paso por este espacio mágico y encuentro poesía y una gran sensibilidad de parte de quien lo escribe.
Felicitaciones
Arianna